El Volkswagen Tiguan R cuenta con modificaciones estéticas en paragolpes, llantas e interior, destacándolo del resto de la gama. También dispone de un opcional muy interesante que le da mayor deportividad al conjunto, hablamos del sistema de escape firmado por Akrapovič, marca muy conocida de escapes en el mundo de las motos y, también, para coches.
Este sistema de escape ya lo hemos podido probar en otros vehículos como el Volkswagen Golf R, Volkswagen T-ROC R o el CUPRA Ateca, en todos los casos, con un sonido deportivo pero no molesto.
En el caso del Tiguan R sucede algo parecido, suena cuando tiene que hacerlo, en el modo Race, también es muy silencioso en modos como el confort.
Este Tiguan R poco tiene que ver, dinámicamente y visualmente hablando con las versiones R-Line.
Estéticamente hablando el Tiguan R lleva un kit especifico de paragolpes, llantas, taloneras, frenos, escapes, todo ello en conjunto le otorgan una visual mucho más deportiva.
El interior también cambia con unos asientos tipo baquet.
Nuestra unidad traía como extras ayudas como; Cruise control adaptativo, detector de ángulos muertos y alerta de trafico posterior. Top view camera de 360º ideal para aparcar o salir de los garajes con poca visibilidad.
A lo largo de la semana que hemos convivido con él, como es natural, lo hemos sometido al uso de todo tipo de vías transitables y no tan transitables. Siendo en estas últimas donde el uso de la tracción total 4Motion es determinante. Sin la tracción total, si bien se puede hacer un uso plural del Tiguan como todocamino, éste queda muy limitado en cuanto el camino empieza a entrañar cierta complejidad con piedra suelta y pérdidas de tracción. No es por falta de tracción, no, si no por miedo a poder pellizcar una rueda con la piedra suelta, al tener menos perfil puede llegar a pasar.
Recordar que el Tiguan R solo está disponible con tracción 4Motion, no existe con tracción delantera.
Nuestro Tiguan R pasó por todos los caminos que fuimos probando sin ningún tipo de problema.
Y teniendo en cuenta que es un “R” el menos indicado para el uso offroad por la mayor dureza de la suspensión y el menor perfil de los neumáticos, su comportamiento fue soberbio en todo momento.
Con tracción total haciendo uso del selector de modos, accionable mediante una rueda alojada al lado de la palanca de cambios podemos seleccionar diferentes modos. Entre ellos el “OffRoad” que como su nombre indica, es ideal para fuera de la carretera. Con este modo seleccionado puede disfrutar aún más del buen hacer del Tiguan en caminos de cierta complejidad.
Existen también otros modos de uso como son; Confort, Race, Sport, Individual. Todos ellos con una configuración predeterminada que saca el mayor jugo del Tiguan en cada situación. Y con el modo Individual podemos ajustar los parámetros a nuestro gusto o necesidad.
El Tiguan, sobre todo a la hora de conducirlo y tener que entrar dentro de él, da sensación de todocamino. Más alto, con más empaque, todo más grande. Pero una vez se conduce es como llevar un compacto, un Volkswagen Golf por ejemplo.
Es muy estable, de reacciones vivas y con un esquema de suspensión que si bien es tirando a duro por ser un “R”, nos permite apurar mucho en zonas viradas sin apreciar deslizamiento o perdida de trayectoria, es un bastidor perfectamente afinado que consigue un uso sosegado o, también, una conducción más decidida.
En este aspecto nos ha gustado el aguante y tolerancia que tiene en tramos virados sin perder la compostura. Más elevado que otros todocaminos de mayor importe de adquisición y más deportivos. Y todo ello aderezado con un importante empuje por parte del 2.0 TSI que no desfallece y, no olvidarnos del bonito sonido proveniente de los escapes Akrapovič.
Externamente es inevitable no comparar al Tiguan R con el Golf R, son hermanos y por ello deben parecerse. El Tiguan es más grande, pero no mucho más, pero si más habitable. Sigue la línea continuista del Golf que tan buenos resultados ha traído a VW.
En el interior al igual que en el exterior las similitudes con el nuevo Golf son más que evidentes. Dispone ahora de una pantalla multimedia de mayor tamaño, unos faros Led más competentes y con mayor cantidad lumínica. Son pequeños detalles, pero muy importantes.
Las lunas traseras laterales son generosas. No tanto así la trasera, que disminuida por el tamaño de los reposacabezas nos dificulta, en parte, la visión. Aun que estos se pueden bajar a su máxima posición y dejan una buena visibilidad. El Tiguan probado disponía de cámara de visión trasera, facilitando a la hora de aparcar o maniobrar y mejorando la visibilidad.
Por otra parte; la visibilidad delantera es correcta, los pilares A son de un grosor considerable, por suerte no intercalan una pequeña luna en el mismo. El grosor no contempla dificultad alguna para el conductor. Ni una resta potencial de visibilidad. Sólo en ocasiones de curvas cerradas a izquierdas o en una simple rotonda notaremos esa pequeña falta de visión por el grosor del pilar A.
Nuestra unidad de pruebas equipaba proyectores dotados de diodos luminosos. El Tiguan R viene de serie con faros de ledes, no existe la posibilidad de faros de reflexión halógenos.
Los faros de LED se componen de un sistema de diodos luminosos para las luces de cruce y de carretera. Este Tiguan presume de una iluminación más potente tanto en capacidad lumínica como en anchura y distancia, sin duda un alto avance en comparación con los anteriores faros, que ya de por si presentaban una buena cantidad de luz.
IMPRESIONES DE CONDUCCIÓN
El Tiguan R, por su mayor altura disponible y con una suspensión enérgica, no deja notar en exceso el peso en curvas muy cerradas. Donde los balanceos si pueden ser apreciables, pero para nada molestos o intrusivos.
Ahora bien, es un vehículo que permite ir muy rápido con él sin ningún tipo de problema. Pero no deja de ser un SUV, por ello la mayor altura hace que su punto de gravedad también este más alto, es algo a tener en cuenta.
El Tiguan R en comparación con un Tiguan normal es más bajo, su suspensión es regulable en dureza y es unos 20mm más baja.
A la hora de probarlo en zonas reviradas se comportó igual de bien que un compacto racing como podría ser el Golf R.
El 2.0 TSI tienen un funcionamiento muy elástico, proporcionando potencia desde bajas vueltas, estirando con fuerza pasadas las 6000 revoluciones. Es capaz de mover el conjunto con mucha soltura y permite ganar velocidad con suma rapidez.
En vías de tierra e incluso de piedra suelta, el Tiguan R nos permitió adentrarnos en zonas de cierta dificultad, donde su mayor altura y capacidades offroad fueron determinantes. Saliendo airosos sin mayor problema.
FRENADA
El equipo de frenos que monta, por lo menos el de serie, que es el que hemos probado, son más que suficientes para un uso diario y no muy exigente.
Aguantan bien frenadas fuertes pero siempre se echa de menos unas pinzas de doble pistón para una mordida más enérgica y contundente.
Monta discos ventilados de 310mm detrás y los delanteros son también ventilados de 340mm con pinzas mono pistón.
Un equipo de frenos deportivo para un vehículo que, recordemos, completa el 0 a 100km/h en tan solo 4,9 segundos.
TRACCIÓN
El Tiguan R está solo disponible con tracción total 4Motion y es preferible así, si no los 320cv serían sin duda menos aprovechables. El eje delantero tendría que digerir el solo esa potencia y queramos o no, por mucha tecnología siempre se muestran perdidas de adherencia, sobre todo en mojado.
La tracción total 4Motion no solo es útil para caminos de tierra, barro o arena suelta. Si no que en el uso diario es un plus de seguridad. Permitiendo poder hacer uso de toda la capacidad de aceleración del propulsor, ya sea en arrancadas fuertes o en conducción decidida.
También, permite una conducción más relajada en vías con mucha agua, nieve e incluso hielo.
ESTABILIDAD
El Tiguan asociado a un motor como el 2.0 TSI lo que busca es diversión al volante dentro de unos límites. Los 320cv que eroga este motor son suficientes para cualquier persona, es rápido ganando o recuperando velocidad. Adelantar con él es coser y cantar.
Su estabilidad es más que correcta en todo sentido, siendo un vehículo que nos permite mucho en zonas viradas. Donde el límite lo pondrán los neumáticos antes que el propio vehículo.
Transitando por nuestra zona habitual de curvas pudimos comprobar lo bien que funciona el bastidor del Tiguan R, recordándonos al Golf R en muchos aspectos. No en vano derivan de la misma plataforma.
El motor, es difícil que se quede corto. El peso de más de 1.740kg no se deja notar. El empuje que otorga el motor desde muy bajo régimen es notorio y agradable.
REPOSACABEZAS
Dispone de cinco reposacabezas, los delanteros regulables en altura e inclinación. Los traseros sólo son regulables en altura. Algún día las marcas prestaran más atención a esta medida de seguridad y además de hacerlos inclinables detrás, los harán activos. Esperemos que sea pronto.
CINTURONES
Como sucede en el caso de los reposacabezas, el Tiguan trae cinco cinturones tipo estándar de 3 puntos de anclaje.
Si ya con este tipo de cinturones de 3 puntos de anclaje mucha gente no se lo pone, no queremos pensar que pasaría si tuviéramos que utilizar un cinturón tipo arnés como en competición. Gracias a que muchos coches como el Tiguan avisan del cinturón no abrochado mediante sonido o luminoso en el cuadro no hay excusa para no ponérselo.
BEBES Y NIÑOS
En este aspecto el Tiguan es completamente valido para un uso familiar, sus cinco puertas, muy buen maletero (520L) le hacen ideal para dicho cometido. Solo tiene algunos contras, una boca de maletero algo alta. Y unas plazas traseras algo justas de espacio. Pero por lo general es más que viable para este uso.
Dispone de anclajes ISOFIX y TopTether en los asientos traseros.
AIRBAGS
En cuanto a seguridad el Tiguan cuenta con un buen surtido de Airbag, de serie trae 9. Y no dispone de más, ni como opción. Incluye el Airbag de rodillas para el conductor.
RECUPERACIONES
Como ya hemos ido comentando a lo largo de la prueba, el Tiguan R con el 2.0 TSI de 320cv es un portento en recuperaciones. Cumple más que sobradamente con lo que se puede esperar de él. Su peso en vacío es de 1.746kg. El 0 a 100 Km. /h lo realiza en 4,9 segundos. Una cifra más que correcta para un vehículo de este tipo.
Disponer de 320cv debajo del capó hoy día no es muy habitual, solo versiones deportivas como este Tiguan R tienen tal cantidad de potencia.
CAJA DE CAMBIOS
Solo se comercializa con una caja automática de doble embrague DSG de 7 velocidades, preparada para soportar el alto par motor que produce el 2.0 TSI de 320cv.
Este tipo de caja es de fácil uso, con tan solo manejar la palanca selectora y posicionarla en la “D” de drive o directa se puede empezar la marcha, para la marcha atrás lo mismo pero con la “R” de reversa.
Existe la “N” de neutro, punto muerto. Y la “P” de parking para dejar estacionado el vehículo.
En el caso del Tiguan R se puede disfrutar del cambio secuencial mediante levas en el volante, rápido y de fácil uso.
Como suele pasar en casi la mayoría de las cajas de doble embrague, en conducción deportiva subir de marcha es rápido, como cabría esperar, pero bajar marcha no lo es tanto, pero es algo completamente salvable, sabiendo su funcionamiento.
CIRCULANDO POR CARRETERA
En carretera el Volkswagen Tiguan R nos sorprende con unos consumos verdaderamente ajustados, pudiendo obtener medias por debajo de los 9 litros sin problemas. Eso sí, respetando en todo momento los límites de la vía por la que circulemos y haciendo conducción económica.
Según datos en ficha técnica, el consumo combinado es de 9,9 litros a los cien kilómetros recorridos.
Nuestro consumo y teniendo en cuenta que no fuimos especialmente cuidadosos con el acelerador después de más de 400 km por carreteras nacionales con varios puertos, el ordenador nos marcó un consumo de 9,4 litros a los 100km.
En ocasiones a lo largo de la prueba bajo hasta los 9 litros a los 100km. Con un depósito de 55 litros podemos realizar tranquilamente más de 500km.
CIRCULANDO POR AUTOPISTA
En autopista, su comportamiento es noble, responde a las exigencias de su conductor sin miramientos. Destacar su buen aislamiento. El motor es poco perceptible desde el interior. Solo se deja escuchar el rodar de los neumáticos. También están ausentes las vibraciones que podrían ser percibidas en volante, pedales o palanca de cambios.
Haciendo uso de los modos más deportivos como Sport o Race el sonido del motor, escape y admisión se vuelve mucho más grave y deportivo. Se pueden escuchar fuertes petardeos entre cambios de marcha y en retención, sobre todo en el modo Race.
La suspensión filtra correctamente aunque el asfalto este en mal estado.
CIRCULANDO POR CIUDAD
En ciudad el buen PAR del motor disponible desde las 2.000 revoluciones nos facilitara muchos su conducción. Teniendo fuerza desde muy abajo. El Tiguan con este propulsor TSI se presenta muy cómodo para un uso en ciudad. Y con la caja DSG aún más.
El consumo en ciudad se situó cercano a los 11 litros a los 100km recorridos.
CALIDAD DE ACABADOS
Los acabados están a la altura de vehículos de mayor empaque. No se le puede reprochar nada al nuevo Tiguan.
CALIDAD DE MATERIALES
Los materiales empleados en el Volkswagen Tiguan son correctos, tanto los plásticos de tacto gomoso, como las telas o pieles empleadas en asientos, volante y palanca de cambios.
LA OPINIÓN DEL PROBADOR
Está claro que estamos ante un “R” de verdad, lo único que nos limitó en la prueba fueron las ruedas de la unidad probada, monta unas Continental, que no son los más indicados para el Tiguan R a la hora de querer sacar todo su potencial. Si bien no se portaron mal y dieron la talla, pero era evidente que con unos mejores neumáticos se podía sacar más jugo al conjunto.
El Tiguan R tiene un límite de conducción más alto de lo que viene a ser común en este tipo de todocaminos, mayor sin duda que el límite real de las versiones R-Line.
Podemos imaginar que este bastidor con unos neumáticos más deportivos será mucho más efectivo, a la par que divertido.
Por lo demás el Tiguan R es un magnifico coche familiar, perfecto para viajar o de coche de uso diario. Correctos consumos, baja rumorisdad y muy habitable con un maletero más que capaz.
Y si quieres ir con una sonrisa de oreja a oreja a diario, activa el modo Race y disfruta del increíble sonido del sistema de escape fabricado en titanio de la marca Akrapovič, te oirán llegar desde lejos.
CONCLUSIONES
Este nuevo Tiguan R es un mata gigantes, otorgando a su conductor una completa seguridad y control en todo momento gracias a sus 320cv disponibles, la seguridad está más que servida.
A FAVOR:
Potencia, carácter, sonido de escape Akrapovič.
A MEJORAR:
Precio, consumos, capacidades offroad.
DATOS TÉCNICOS
Versión: | 2.0 TSI 320cv | Puertas: | 3 | |
Cilindros: | 4 en línea | Plazas: | 5 (2 + 3) | |
Par máximo: | 420 Nm de 2100 a 5350 rpm | Maletero: | 520 litros | |
Distribución: | Dos árbol de levas en la culata | Peso: | 1.746 Kgs. | |
Alimentación: | Gasolina- inyección mixta, directa e indirecta
4 válvulas por cilindro Turbo – Intercooler |
Depósito: | 58 litros | |
Tracción: | Total | Velocidad: | 250 km/h | |
Cambio: | Automática, 7 velocidades |
CONSUMOS
Consumo medio WLTP | 9,9 (l/100 km) | ||
Emisiones de CO2 | 224 (gr/km) | ||
Normativa de emisiones | Euro 6 |
DIMENSIONES
Largo / ancho / alto (mm) | 4514 / 1859 / 1668 |
0 a 100 km/h: 4,9 segundos
Precio de unidad probada sin extras y con descuentos: desde 66.730€
GALERÍA DE FOTOS