Hace pocas semanas tuvimos a nuestra disposición una unidad del nuevo Seat Ibiza. Se trataba del Seat Ibiza 1.2 de 60cv en acabado Reference. Con el motor de acceso a la gama en gasolina. Este Ibiza nos mostró los leves cambios de imagen realizados al nuevo Ibiza en niveles de equipamiento de acceso a la gama. En la pruebo que nos ocupa hemos tenido el placer de conducir otra unidad del nuevo Ibiza. En esta ocasión se trata de una versión FR. Dotada del motor 2.0 TDI que produce una potencia de 143cv. Hace ya un par de años probamos justo este mismo motor en el Ibiza FR del 2009. Los cambios entre ambos son sólo estéticos. En cuanto a dinamismo son idénticos. Si nos centramos en los cambios del nuevo Ibiza, todos ellos son estéticos, tanto fuera como dentro del vehículo. Exteriormente dispone de faros delanteros de nuevo diseño que incluyen luces diurnas. En el caso de los dotados de bi-xenon las luces diurnas son mediante diodos luminosos. El paragolpes delantero es de nuevo diseño. De mismo modo sucede con las llantas. El Ibiza FR TDI sin duda se comporta increíblemente bien, su motor es poderoso en todo el rango útil y cuenta con bastidor muy bien afinado que aun soportando unos kilitos de más en el eje delantero apenas se nota en comparación con la versión gasolina 1.4 TSI.
Visibilidad
El nuevo Ibiza en esta versión FR tiene una visibilidad francamente buena hacia delante y lateralmente, la visión trasera tampoco presenta problemas. Desde dentro el espejo interior cumple lo suficiente. En cuanto a los retrovisores exteriores nos informan bien de lo que nos falta por saber detrás, siendo un Coupé su visibilidad nos ha gustado bastante. En el capítulo de iluminación tenemos que reseñar sus faros de Xenón que iluminan con total nitidez por la noche, lo cual es un punto a su favor en cuanto a visibilidad y seguridad, también indicar que este nuevo Ibiza viene dotado de luces de día. Hemos de comentar que el coche con ellas se ve mucho mejor desde lejos, lo cual es otro plus en seguridad.
Impresiones de Conducción
En una comparación objetiva entre el FR TSI y el FR TDI podemos decir que las diferencias son mínimas, el motor TSI aparentemente es más rápido y con mayor estirada, lógico. El Diésel nos empuja de manera más rápida dando lo mejor de sí a bajas vueltas, obligándonos a usar mucho el cambio si queremos diversión. Está claro que aun que las mecánicas diésel hayan evolucionado en los últimos años, para darse un homenaje en zonas reviradas lo mejor hoy día es un motor gasolina, sin entrar en el debate de si es mejor atmosférico o turbo. La prueba realizada al Ibiza FR comprendió principalmente por carreteras viradas, donde el FR se encuentra en su salsa y nos enseña sus mejores dotes. A la hora de exprimir el bastidor del Ibiza FR hemos de tener en cuenta que es igual de estable que su antecesor. Muy fácil de ir rápido con él. El bastidor es capaz de asumir y salvaguardar muchos errores cometidos por conductores inexpertos. Y si por un casual entramos muy pasados en una curva, el ESP será nuestro ángel de la guarda, corrigiendo rápida y limpiamente la trazada. Pero ojo, el ESP no hace milagros, lo mejor es tener dos dedos de frente y saber dónde están los limites. Cuenta con el sistema XDS de bloqueo de diferencial eléctricamente. Muy útil para una conducción decidida.
Frenada
El nuevo Ibiza FR monta el mismo sistema de frenado que por ejemplo equipa el actual Volkswagen Polo GTI. Este sistema se compone por discos en ambos ejes. Delante discos ventilados de 288mm. Detrás discos macizos de 233mm. El sistema de frenos se muestra capaz en una conducción diaria y que no implica mucho esfuerzo. A la hora de sacarle los colores al FR el sistema de frenos cumple perfectamente. No castigando los frenos inútilmente disponemos de una buena frenada en cualquier momento. Incorpora ABS de última generación que se vuelve muy intrusivo cuando los frenos están en sus peores momentos. Y ayuda a la frenada de emergencia. El sistema XDS puede llegar a fatigar en exceso los frenos en una conducción rápida y decidida.
Tracción
El Ibiza FR 2.0 TDI no presenta síntomas de pérdidas de tracción, puede que debido a los neumáticos que monta en medidas 215/40/17″ Bridegstone RE50a, que le aseguran un agarre muy bueno, ya que el motor no tiene una potencia excesiva para » tanta » goma en contacto con el suelo. Como medida electrónica cuenta con control de tracción y de estabilidad (ESP) lo que es una medida de seguridad más.
Estabilidad
Seat ha dotado al Ibiza FR de una soberbia estabilidad, sacrificando comodidad de marcha. La suspensión es dura, seca, y rebotona por ciudad, llegando a ser molesta en asfaltos en mal estado. En carreteras de doble sentido muy ratoneras nos olvidamos rápidamente de lo que padecemos en ciudad, disfrutando de una estupenda estabilidad. El FR no acusa balanceos y presenta una alta seguridad a la hora de ir un poco rápido. El nuevo Ibiza FR TDI es muy fácil de llevar rápido con completa seguridad, responderá a todo lo que le pidamos aun yendo algo pasado en curvas.
Reposacabezas
Los reposacabezas son regulables en altura e inclinación, los traseros son idénticos a los delanteros, también cuentan con regulación de altura y de inclinación.
Cinturones
Los cinturones de seguridad que equipa el Ibiza FR son de tres anclajes, están dotados de pretensores pirotécnicos los delanteros y detrás los tres son de tres puntos. No dispone de avisador acústico si emprendemos la marcha sin el cinturón puesto. Solo nos avisa mediante un icono en el cuadro de mandos.
Bebes y Niños
El actual Ibiza en su versión FR dispone del sistema ISOFIX para el anclaje de sillitas de bebe en el asiento posterior. El maletero es lo suficientemente grande como para albergar todo los bártulos de nuestros hijos. La altura de carga es buena, y el acceso del mismo también.
Airbags
La versión FR del Ibiza viene bien dotada, con airbag frontal de conductor y pasajero, laterales de cabeza y tórax, y detrás laterales y de cabeza.
Euroncap
En el test de seguridad el nuevo Seat Ibiza obtiene cinco estrellas para pasajeros, cuatro para bebés y cuatro para peatones, es evidente el buen trabajo realizado.
Recuperaciones
La versión diesel 2.0 TDI del Ibiza FR no cuenta con la posibilidad de poder montar la caja de cambios automática DSG, como si lo hace su hermano el FR 1.4 TSI gasolina, siendo este más rápido por esto mismo. Si el FR 2.0 TDI pudiera tener DSG estamos seguros que bajaría de los 8,2 segundos en los que hace el 0 a 100km/h. A la hora de demandar potencia en un adelantamiento o simplemente una recuperación rutinaria el FR 2.0 TDI es más contundente que las versiones TSI, su empuje es más notorio, eso sí, sólo es la sensación, en cifras el gasolina es superior en todo, el DSG es bueno, muy bueno.
Caja de Cambios
Actualmente el Ibiza en su variante FR 2.0 TDI sólo dispone de cambio manual de seis velocidades. No se sabe si en un futuro podrá montar DSG, pero me temo que por motivos de espacio tendremos que conformarnos con el cambio manual de seis relaciones, que a todas luces cumple sobradamente con lo que se necesita. En funcionamiento las marchas entran con decisión y de manera rápida, el escalonamiento es correcto permitiendo tener unas buenas prestaciones.
Circulando por Carretera
Como todo vehículo con características deportivas, donde más se disfruta de él es en las carreteras de doble sentido. Donde a la hora de adelantar podemos exprimir las prestaciones sin temor a que nos quiten puntos o poner en peligro otra persona. Eso sí, siempre respetando los límites de la vía. El comportamiento del Ibiza FR 2.0 TDI es muy neutro. Y con unos consumos apreciablemente bajos en todo tipo de vías. En el caso de la carretera el homologado por la marca es de 3,9 litros. Demasiado bajo, pero no imposible de alcanzar si respetamos los límites de tráfico a raja tabla. Nuestro consumo no fue tan correcto como el homologado, pero si sorprendente teniendo en cuenta que en carreteras de curvas no vamos todo el rato en la marcha más larga y con el pie derecho tranquilo. 5,5 litros a los 100km.
Circulando por Autopista
En autopista debemos olvidarnos de todos los aspectos deportivos del FR, ya que no podremos hacer uso de ellos, solo sufriremos con el tarado de la suspensión deseando dejar esta carretera tan aburrida y llegar al tramo de curvas conocido que está cerca de nuestra casa. El 2.0 TDI es prácticamente inaudible desde dentro del Ibiza. Se oye tan poco que a la hora de pisarle se nos hace poco ruido y todo, se espera de él un sonido más trabajado, tanto de motor como de escapé que apenas se oye. Es diésel no podemos pedir más. El consumo en este tipo de vías según el homologado por Seat es de 4,6 litros a los 100km. Como pasa en el consumo por carretera nuestro consumo no es tan afinado, se situó en 5,4 litros a los 100km
Circulando por Ciudad
En la urbe, el Ibiza pasa bastante desapercibido, su imagen es poco racing. Si se mira con detenimiento y sobre todo por el escapé de doble salida sabemos que estamos ante un Ibiza diferente, pero en marcha se puede confundir con un simple 1.6 TDI Style. Lo más notable en ciudad al igual que en autopista/autovía es el tarado de la suspensión, es dura, y si el asfalto esta estropeado o nuestro barrio plagado de resaltos, badenes, nuestros riñones sufrirán con solo ver un badén. En este caso Seat ha optado por una menor comodidad dando mayor estabilidad donde tiene que ser, porque para eso es un FR. El consumo en ciudad es gratamente satisfactorio con las prestaciones del FR, no obstante no nos hagamos muchas ilusiones, a la hora de demandar potencia las medias serán correctas como en todo diésel de similar potencia. El consumo homologado es de 5,9 litros. Nuestro consumo estuvo más cerca de los 7/8 litros que de los 9. Eso sí, con mucha ciudad.
Calidad de Acabados
El nuevo Ibiza FR 2.0 TDI cuenta con excelentes acabados y ajustes. El acabado FR otorga al interior un aspecto más racing.
Calidad de Materiales
Los materiales utilizados en el confeccionado del Ibiza FR son correctos, plásticos de calidad en partes visibles y telas que presumen de ser duraderas al paso del tiempo y uso.
Conclusiones
Actualmente la gama FR del Seat Ibiza ha crecido con nuevas mecánicas tanto en gasolina como diésel. El 2.0 TDI de 143cv sigue siendo el tope en las versiones diésel. Es un vehículo con carácter racing sin dejar de ser válido para un uso diario. Su buen motor con consumos bajos permiten disponer de una alta autonomía.
Si buscamos disponer del acabado FR pero no necesitamos la potencia del 2.0 TDI o del 1.4 TSI, podemos optar por el FR 1.6 TDI de 105cv o su hermano el 1.2 TSI de también 105cv. Con una potencia suficiente para todo uso.
A favor: Motor, estabilidad, consumos
A mejorar: suspensión seca, sonido motor al ralentí, acceso plazas traseras.
Redactor y probador: Daniel Galdeano Martínez
Fotos: Daniel Galdeano Martínez
Vídeo: