Sete Gibernau volverá a competir en el Mundial de motociclismo, en este caso en el campeonato de MotoE que arrancará el año que viene, y de la mano del equipo Pons.

A sus 45 años, el piloto barcelonés, subcampeón del mundo de MotoGP en 2003 y en 2004 con Honda, se retiró definitivamente de las carreras en 2009, después de un regreso infructuoso de la mano del equipo privado de Francisco Hernando.

En sus 11 temporadas completas en la categoría de las motos pesadas, Gibernau llegó a correr con Yamaha, con Honda, con Suzuki y con Ducati, y acumuló un total de nueve victorias, 30 podios, 13 poles y ocho vueltas rápidas.

Nada más comenzar esta temporada, el español asumió las riendas de Dani Pedrosa, a quien hizo de agente a lo largo de todo este 2018, antes de que el de Castellar del Vallès (Barcelona) decidiera colgar el mono –en 2019 hará las funciones de probador de KTM–.

De esta forma, Gibernau le dará bombo a un campeonato que debutará el curso que viene y que contará con 18 pilotos y cinco carreras.

“Nunca pensé que volvería a participar en un campeonato desde que me retiré definitivamente del motociclismo. Me hace especial ilusión vivir y pilotar esta nueva generación de motos eléctricas y poner mi granito de arena a su desarrollo, además de poder decir que habré pilotado las tres generaciones de motos que han pasado por el Mundial: el pasado de las dos tiempos, el presente de las cuatro tiempos y el futuro de las eléctricas”, conviene Gibernau en la nota emitida este lunes por la mañana.

“Al ser una categoría completamente nueva, teníamos claro que debíamos contar con un piloto experimentado y no veo mejor opción que la de Sete para unirse a este proyecto. Su experiencia y su capacidad es lo que hace ser la referencia en la categoría”, concluye Pons, el dueño de la escudería.

[Fuente: motorsport.com]