Mercedes-AMG mantiene el mayor de los secretismos alrededor de su Project ONE
El Mercedes-AMG Project ONE se encuentra en plena fase de pruebas con el objetivo de afinar lo que vimos hace casi un año durante la presentación oficial del modelo en el Salón de Frankfurt. Dicen los que lo han visto que su sonido es exacto al del monoplaza de Fórmula 1.
El Mercedes-AMG Project ONE se presentó por todo lo alto hace casi un año en el Salón del Automóvil de Frankfurt. Desde entonces la marca de la estrella no ha dicho mucho sobre él, pero eso no significa que el proyecto esté parado. De hecho, su desarrollo va viento en popa, aunque oficialmente sólo confirman desde Alemania que trabajan intensamente para perfeccionar lo presente.
Los ingenieros alemanes han sometido al motor a todo tipo de pruebas en el banco de potencia que poseen en Brixworth, Inglaterra. Por suerte esa fase ya ha terminado. A día de hoy las unidades de potencia están instaladas en varios prototipos que completan maratonianas jornadas de test en tierras británicas. Todo se lleva con total discreción, pero aseguran los que han podido ver al Mercedes-AMG Project ONE que su sonido es casi calcado al del monoplaza que llevó a Hamilton a conquistar su tercer mundial en 2015.
Queda por ver si Mercedes logrará mejorar lo presentado en Frankfurt el pasado ejercicio, donde nos encontramos con una unidad de potencia formada por un motor V6 turbo de 1.6 litros y otros cuatro eléctricos que desarrolla más de 1.000 caballos de potencia. Ésta permite recorrer hasta 25 kilómetros en modo totalmente eléctrico, acelerar de 0 a 200 kilómetros/hora en menos de seis segundos y alcanzar una velocidad punta de más de 350 kilómetros/hora.
Todo lo que dio de sí la presentación del Mercedes-AMG Project ONE
Lewis Hamilton fue el encargado de presentar el proyecto de Mercedes-AMG en el salón alemán. Como no podía ser de otra forma, el tricampeón de Fórmula 1 recurrió a las redes sociales para retransmitir en directo el encendido del motor V6 del Project ONE. Una delicia para los oídos amantes del automovilismo, como puedes escuchar en el vídeo que hay por encima de estas líneas. Un momento sin duda muy especial para todos los implicados en el proyoecto, pero también para un Hamilton que conoce muy bien la parte mecánica de este Project ONE.
No obstante, el Mercedes-AMG Project ONE equipa el motor F1 EQ Power+ que montaba el Mercedes-AMG W06, monoplaza del Fórmula 1 de la temporada 2015 con el que el piloto británico salió campeón. Este propulsor está asociado a una MGU-H que hace las veces de turbocompresor eléctrico y un MGU-K o motor eléctrico. El conjunto mecánico, del que os hablaremos más adelante se culmina con las baterías de ion litio derivadas de las usadas en Fórmula 1 y dos motores eléctricos en el eje delantero.
A nivel de diseño, por fin podemos ver el Mercedes-AMG Project ONE al completo y con toda su brillantez. En su frontal hay tres detalles que sobresalen por encima del resto. El primero son sus agresivas ópticas LED con diseño casi triangular. Por debajo de estas se sitúa un paragolpes con un afilado splitter frontal y unas notables tomas de aire en color negro, mismo tono que lucen las salidas de aire que presenta el capó, divididas verticalmente para reconducir a su vez el flujo aerodinámico, solución que ya se ha visto en el Ford GT.
El Mercedes-AMG Project ONE cuenta con nos marcados pasos de rueda que da protagonismo a sus llantas de aleación, aunque sin duda las puertas con apertura tipo tijera se llevan todo el protagonismo en su vista lateral. A menos así debería ser de no existir una ‘aleta de tiburón’ con una notable toma de aire en su inicio, muy en la línea del F-Duct que se utilizaba en Fórmula 1. Por su parte, su trasera plagada de tomas de aire para refrigerar el motor se caracteriza por unos faros reducidos a la mínima expresión. Dentro de la ‘parrilla’ que parece formar su zaga, sobresalen sus tres salidas de escape. Por debajo, su trabajado difusor.
Respecto a su mecánica, Mercedes-AMG recurriría a un sistema de propulsión muy conocido en el mundo de la competición, ya que empleará el tren motriz -motor y transmisión- del Mercedes-AMG W06, monoplaza con el que la marca domina en el Mundial de Fórmula 1 en 2015. Un bloque V6 de 1.6 litros con un turbocompresor extra de unos 750 caballos de potencia y una eficiencia términa del 43%. Esta unidad recibe un cigüeñal a medida, nuevos pistones y una electrónica revisada. Rendirá de serie por encima de las 4.000 revoluciones por minuto, pudiendo alcanzar las 13.500 revoluciones y tendrá una vida aproximada de 50.000 kilómetros.
Las prestaciones del motor V6 se complementarán con la potencia de cuatro motores eléctricos, dos en su eje delantero, otro en el cigüeñal (161 caballos) y un cuarto como turbocompresor eléctrico (107 caballos extra). El resultado, 1020 caballos de potencia total para un modelo que además contará con una autonomía eléctrica de 24 kilómetros.
Con el objetivo de alcanzar una relación peso/potencia de 1:1, se ha diseñado una transmisión que sólo pesa 420 kilogramos. El motor y la caja de cambios de ocho velocidades serán parte estructural del chasis monocasco de fibra de carbono y a una carrocería ultraligera de idéntico material. Gracias a todo ello, el Mercedes-AMG Project ONE podrá alcanzar los 354 kilómetros por hora y acelerar de 0 a 100 en 2,5 segundos.
El Mercedes-AMG Project ONE, diseñado para tener un peso contenido con la utilización masiva de fibra de carbono, no se podía permitir tener un habitáculo lleno de lujos. De hecho, el interior se ha reducido a la mímima expresión, como si de un coche de competición se tratase. De hecho, los acabado son bastante espartanos y en fibra de carbono. Destaca su volante, no muy lejano al que se utiliza en Fórmula 1, su cuadro de mandos en forma de pantalla a color horizontal y su segunda pantalla táctil, que servirá para dar datos sobre la aerodinámica y otros aspetos del vehículo.
Se producirá 275 unidades a razón de más de 2,25 millones de euros por cada uno. Todas están vendidas, aunque los compradores que han tenido que cumplir algunos requisitos para hacerse con un Project ONE. En primer lugar tenían que poseer un Mercedes desde hace largo tiempo y en segunda instancia debían acreditar que usarán este hypercar de forma activa y que por ende no será producto para la especulación. A cambio, Mercedes-AMG suministrará cada unidad del Project ONE al concesionario que elija el cliente para su recogida, aunque eso no será antes de 2020.
Quizá ese año también sea el elegido para que el Mercedes-AMG Project ONE conquiste Nürburgring. No obstante, Tobias Moers, jefe de AMG, ya ha dejado claro que están valorando muy seriamente asaltar el récord absoluto del ‘Infierno Verde’. Un registro que data de los 1.000 kilómetros de Nürburgring de 1983, cuando Stefan Bellof completó una vuelta al trazado con un Porsche 956 en un tiempo de 6 minutos, 11 segundos y 1 décima durante la sesión de clasificación del evento. Por supuesto, esta tentativa también serviría para dejar atrás el récord de un vehículo de producción que tiene el Porsche 911 GT2 RS en 6 minutos y 47 segundos.
A pesar de las cifras que se manejan en torno al Mercedes-AMG Project ONE, el reto es cuanto menos mayúsculo. No obstante, los técnicos de la marca de Stuttgart tendrán que afinar a la perfección el rendimiento del motor V6 de 1.6 litros híbrido de más de 1.000 caballos de potencia, su tremenda carga aerodinámica –675 kilogramos de carga– gracias en parte a su enorme alerón trasero o el balance de pesos en un coche que tendrá un peso final en torno a los 1.350 kilos.
EL PROJECT ONE, EN FLORIDA
El Mercedes-AMG Project One se ha dejado ver en público en ocasión del Concurso de Elegancia de Florida, en el que el radical hypercar de la marca de la estrella ha sido una de las principales atracciones. Lo más interesante del caso es que no se trataba de un modelo estático, sino de una unidad funcional. De hecho, un YouTuber siguió la flecha de plata desde el párking donde estaba guardada hasta la localización del concurso.
Pero no nos emocionemos, porque todavía es pronto para ver todo el potencial de este coche. Se evidencia por las notables dificultades que tuvo para subir una leve pendiente, ‘misión’ para la que tuvo que ser empujado. Se entiende que el sistema de baterías y el tren motriz todavía no están optimizados y los técnicos de la marca han preferido no forzar la mecánica del hypercar. Eso sí, una vez que esté terminado y listo para la producción, el Project One será un coche capaz de rivalizar por el récord absoluto del Nürburgring Nordschleife. Ésa es la promesa de Mercedes-AMG, que lo ha equipado con un motor de Fórmula 1. Eso sí, tendrán que encontrar un piloto que se atreva a semejante reto.
[Fuente: soymotor.com]