- La cadena de tracción e-Hybrid combina las prestaciones de un motor 1.5 turbo gasolina, que desarrolla 130 CV con las de un motor eléctrico de 15 kW (20 CV).
- Esta tecnología suministra una propulsión 100% eléctrica en momentos clave, como el arranque, la circulación a bajas velocidades o a velocidad de crucero o en las maniobras de estacionamiento.
- Gracias a la tecnología e-Hybrid, el consumo y las emisiones de CO2 se reducen un 15% respecto a las versiones gasolina equivalentes.
- Conoce cómo funcionan los e-Hybrid de Jeep de forma muy visual y sencilla en el vídeo adjunto a este comunicado.
La electrificación es totalmente compatible con la libertad, la polivalencia y las cualidades “offroad” que distinguen, desde sus orígenes, a Jeep. La tecnología híbrida suave e-Hybrid, presente en las gamas del Jeep Compass y el Jeep Renegade, asegura una reducción del 15% del consumo de combustible y de las emisiones de CO2 respecto a las versiones gasolina equivalentes. Conjuga la potencia y la agilidad de un motor turbo 1.5 gasolina de 130 CV y 4 cilindros con la suavidad de un propulsor eléctrico de 15 kW (20 CV), todo ello gestionado eficientemente por una caja de cambios de doble embrague de 7 velocidades.
El motor gasolina 1.5 es fruto de un exhaustivo proceso de I+D en el que se ha puesto el foco en la mejora de la eficiencia. Se ha desarrollado una nueva culata, una cámara de combustión compacta y una doble sincronización “high tumble” de las válvulas y los conductos de admisión variable.
Para aumentar la autonomía eléctrica y reducir emisiones y consumo, el sistema de frenado de los Jeep Renegade y Compass e-Hybrid cuenta con una función de “autocarga” que usa las desaceleraciones para maximizar la recuperación de energía cinética y mejorar la eficiencia. Recupera la energía que de otro modo se desperdiciaría cuando el vehículo desacelera (e-Coasting) y durante el frenado (Regenerative Braking).
Con la función Silent Start, el vehículo arranca sin necesidad de encender el motor de gasolina, utilizando un modo de conducción silencioso, puramente eléctrico. Está asociada a e-Launch, que vuelve a poner en marcha el vehículo en paradas cortas, como los semáforos.
Asimismo, con e-Creeping, el motor eléctrico proporciona el arranque que normalmente utilizan los vehículos automáticos, a una velocidad que puede variar desde 0 km/h hasta el equivalente al motor de gasolina al ralentí en primera o marcha atrás.
Se puede aumentar el par enviado a las ruedas gracias al “e‑boosting”, que recurre al motor eléctrico que apoya al motor de gasolina; además, aprovechando el par (de tracción o de frenado) desarrollado por el motor eléctrico, es posible optimizar el punto de funcionamiento del motor de gasolina.
A través de Electric Drive, el vehículo puede circular en silencio y con cero emisiones, utilizando únicamente el motor eléctrico, mientras el motor de gasolina está apagado.
Al volante, e-Queueing permite que el vehículo pueda seguir avanzando en caso de retención de tráfico, siguiendo un patrón de «parar y continuar» en modo totalmente eléctrico.
Al final del trayecto, e-Parking: simplifica las maniobras de estacionamiento, que pueden realizarse únicamente con propulsión eléctrica, para garantizar una experiencia práctica y silenciosa.