- Buenos para la espalda: asientos AGR calefactados y con función de masaje
- Interior agradable y cálido: sistema QuickHeat y volante calefactado
- Gran confort en la segunda fila: asientos traseros y espacio para los pies calefactados
- Una visión clara en todo momento: parabrisas térmico ThermaTec
- Calefacción antes de partir: preacondicionamiento disponible en los Grandland y Astra híbridos así como en los vehículos 100% eléctricos con bomba de calor
La temporada de frío se acerca. Lo que significa cada mañana rascar el hielo de los cristales y encender la calefacción para conseguir la temperatura adecuada antes del inicio de la marcha. Pero todo esto no supone ningún problema para los conductores de Opel, dado que sus turismos, desde el abanderado de la marca, el Insignia, hasta los nuevos Astra, Grandland y Crossland o los 100% eléctricos Mokka-e, Corsa-e, Combo-e Life y Zafira-e Life se convierten en acogedoras fuentes de calor en invierno. Numerosas tecnologías y opciones de equipamiento contribuyen a que los coches puedan dar la bienvenida cada mañana a sus conductores y pasajeros con una temperatura agradable desde el principio. El frío simplemente se queda fuera. Los asientos ergonómicos activos firmados por AGR, que se pueden ajustar y calentar de muchas maneras, así como la calefacción para el volante y la zona de los pies, garantizan un viaje tranquilo y seguro en todo momento. En función del modelo, el parabrisas calefactado asegura una visión óptima incluso con las temperaturas más gélidas que cubren todo de hielo, y la bomba de calor en los Opel 100% eléctricos garantiza un suministro de calor especialmente eficiente. Además, en los coches eléctricos también se puede utilizar el preacodicionamiento térmico cómodamente desde la aplicación myOpel.
Asientos de referencia: firmados por AGR, con funciones de masaje, calefacción y ventilación
Los asientos resultan cruciales para hacer los viajes de la forma más cómoda y relajada posible. Son el vínculo entre la persona y el vehículo. Por ello, Opel siempre ha centrado grandes esfuerzos en su desarrollo, consiguiendo tener los mejores asientos de su categoría; la certificación de AGR se ofrece en muchos modelos y versiones, y son habituales en los modelos de Opel. Por ejemplo, los asientos ergonómicos desarrollados internamente y certificados por AGR (“Aktion Gesunder Rücken e.V.”; campaña para unas espaldas más saludables) no sólo permiten que conducir largas distancias sea un auténtico placer en los modelos más altos de la gama de Opel, los Insignia y Grandland, sino también en el Crossland y el nuevo Astra. La diversidad de opciones de ajuste, desde la longitud de la banqueta, la altura, la inclinación, el cojín extensible, los apoyos laterales para banqueta y respaldo hasta el apoyo lumbar electroneumático garantizan una postura saludable con independencia de la estatura de cada persona. En el nuevo Astra los asientos delanteros se han colocado 12 milímetros más bajos que en su predecesor, para una experiencia de conducción más deportiva. El conductor y el pasajero delantero pueden sentarse, como opción, en los asientos “Sport” o en los asientos “Comfort”. Los asientos delanteros y traseros laterales, según versión, pueden estar calefactados. Junto a la tapicería de cuero Nappa, el asiento del conductor dispone además de funciones de ventilación y masaje.
Lo último por deportividad y ergonomía es el asiento GSi performance sport desarrollado para el Insignia GSi (consumo combinado de combustible y emisiones del Opel Insignia GSi con motor 2.0 Turbo de inyección directa de 169 kW/230 CV según la normativa WLTP: 8,8-7,9 l/100 km y 200-179 g/km de CO2). Probado por AGR, este asiento, con el reposacabezas integrado, combina una excelente sujeción lateral con todas las características de confort del Insignia. Dispone de calefacción y ventilación regulables en intensidad, función de masaje (en el asiento del conductor) y contorno variable. Los asientos delanteros del Insignia más deportivo también sobresalen por su elevado respaldo con el reposacabezas integrado. Puede ajustarse de forma eléctrica en sentido longitudinal, en altura y en inclinación tanto para la banqueta como para el respaldo. El soporte lumbar de cuatro vías se encomienda a unos cojines de aire y los apoyos laterales de contorno variable también se activan eléctricamente. Desarrollado por los especialistas de Opel en ofrecer posiciones de conducción saludables, el asiento GSI performance sport es único al combinar apoyos laterales deportivos junto a características específicas de confort.
En Opel, sin embargo, un buen asiento no es una cuestión exclusiva de la categoría del vehículo. Incluso en modelos como los Corsa y Mokka, así como en el monovolumen Zafira Life, están disponibles los asientos comfort multiregulables con soporte lumbar y función de masaje para el conductor, así como los asientos calefactados para el conductor y el acompañante, que aumentan el bienestar desde el momento en el que se accede al habitáculo hasta que éste se abandona. Los pasajeros de los asientos traseros de los Opel Corsa, Mokka y Crossland también pueden disfrutar de serie del sistema de calefacción para los pies, que ayuda a olvidar las frías temperaturas del exterior.
Todo bajo control: sistemas de calefacción para aumentar el confort y la seguridad
Los asientos activos ergonómicos y calefactados representan un elemento de bienestar, salud y seguridad; todo en uno. No sólo garantizan que el conductor y los pasajeros se sienten cómodamente, en una posición que no perjudica a la espalda, sino que además gracias a la calefacción de los asientos la gruesa chaqueta de invierno puede quitarse incluso antes de iniciar la marcha. Esto asegura que la ropa no restringe la libertad de movimientos y que el cinturón de seguridad se ajusta al cuerpo sin holguras; sólo así puede desarrollar toda su protección en caso de colisión. La seguridad también se ve reforzada por el volante calefactado, que calienta dedos y manos en unos pocos segundos.
Igual de útiles son los sistemas para combatir el hielo, como el parabrisas térmico ThermaTec del Opel Insignia o de los nuevos Astra, Grandland y Crossland. Con sólo pulsar un botón los discretos cables térmicos del parabrisas se activan para garantizar la máxima visibilidad. Con esta función, la tendencia del cristal a empañarse cuando surge la humedad y hace frío se convierte en algo del pasado. Los retrovisores exteriores calefactados también proporcionan una visión nítida de lo que sucede a nuestras espaldas.
Dependiendo del modelo de Opel, el sistema opcional de calentamiento rápido eléctrico Quickheat también ayuda a calentar el interior y, por lo tanto, las superficies acristaladas rápidamente. En solo unos segundos el aire caliente fluye por el interior del coche.
Eficiente preacondicionamiento para los vehículos 100% eléctricos de Opel: bomba de calor con control desde el smartphone
Los modelos 100% eléctricos de Opel suponen la elección correcta y más cómoda para aquellos que quieren tener en invierno su coche caliente nada más subirse. Los propietarios de coches eléctricos como los Corsa-e o Mokka-e pueden utilizar la aplicación myOpel para programar el preacondicionamiento térmico del interior desde el confort del sofá de su casa. En pocos minutos el habitáculo del coche no sólo alcanza una temperatura confortable, también las ventanillas quedan libres de hielo en caso de que haya habido heladas.
Al mismo tiempo es necesaria una gestión eficiente de la energía de los vehículos 100% eléctricos, especialmente en invierno, para mantener un bajo consumo de energía y, por consiguiente, una elevada autonomía. Para conseguirlo basta con activar el control de preacondicionamiento mientras el coche permanece conectado a la red eléctrica externa a través de una toma de corriente doméstica, un wallbox o un cargador rápido; cuando la energía necesaria para la calefacción procede de la red eléctrica externa y la autonomía eléctrica completa está disponible desde el inicio de la ruta. Gracias a la bomba de calor, de serie en los Corsa-e y Mokka-e, el calor residual y perdido generado puede utilizarse para calentar el interior sin tener que recurrir a una calefacción convencional y reducir la autonomía.