Cuando se cumplen seis años del accidente de esquí de Michael Schumacher, su familia sigue con la política de dar pocas noticias sobre el estado de salud del siete veces campeón del mundo de F1, a pesar del interés de los aficionados.
Este 29 de diciembre de 2019 se cumplen exactamente seis años desde que Michael Schumacher sufriera el accidente más grave de su vida, pero no fue en un circuito de F1. Mientras esquiaba en Meribel (Francia), el alemán tropezó con una roca, cayó y se golpeó con otra piedra más adelante. Según los informes, el impacto fue tan grande que el casco que llevaba puesto se rompió.
Después de permanecer en coma, ser trasladado a un hospital en Lausana (Suiza), y recibir el alta para continuar el tratamiento en casa, las noticias sobre el estado de salud del alemán siempre han sido escasas, apareciendo muchos rumores, tanto de mejoría como de su muerte.
Según el editor de la edición alemana de Motorsport.com, Stefan Ziegler, existe un blindaje familiar y una especie de ‘acuerdo entre caballeros’ entre la prensa y la familia.
«Sólo hablamos de Schumacher cuando hay noticias que provienen de la familia», señala Ziegler. «Por otro lado, hay varias revistas y sitios web que informan sobre todo tipo de cosas, la mayoría de las cuales son totalmente incorrectas o de mal gusto».
«Pero la familia Schumacher tiene muy buenos abogados que trabajan en estos casos, y generalmente la multa por romper las reglas familiares es cara. Muchos medios de comunicación no hacen nada por miedo al castigo, pero algunos lo hacen para vender más revistas o para obtener vistas».
«El problema es que Sabine Kehm [jefa de comunicación de Michael y ahora de su hijo Mick] y su familia no comparten mucha información. Básicamente es una cosa u otra a lo largo del año. Muchos ‘periodistas’ montan sus propias historias».
Tratamiento en Paris
La noticia más reciente sobre Schumacher, aunque sin muchos detalles oficiales por parte de la familia, fue el viaje del alemán al Hospital Georges-Pompidou para un «tratamiento secreto». Le Parisien fue el primero en informar que Schumi se sometería a un tratamiento con el Dr. Philippe Menasché, un profesional líder en la investigación de células madre.
En la publicación también se afirmaba que Schumacher ya había visitado el hospital dos veces este año, procedente de Ginebra, donde vive, trasladado en helicóptero. No hay noticias sobre si el periódico fue demandado por la familia.
Más tarde, en una entrevista con el diario Marca, el Dr. Menasché negó haber sometido a un tratamiento con células madre a Schumacher: «No hago milagros. Mi equipo no está haciendo ningún experimento, un término abominable que no corresponde a la visión de lo que sería la medicina».
Su hijo sigue sus pasos
Mick Schumacheractualmente es compite en Fórmula 2, pero como el resto de la familia, no revela el estado de salud de su padre. Todo lo que se puede saber a través del piloto que actualmente forma parte de la Ferrari Academy son las comparaciones con la carrera de su padre.
«Ser comprado con mi padre nunca ha sido un problema para mí. Es muy fácil ser comparado con el mejor piloto de la historia de la Fórmula 1 y es un objetivo a alcanzar. Tenerle como ídolo y como mi padre es algo muy especial. Me honra que me comparen con él porque puedo aprender e intentar mejorar», comenta Mick.
Palabra de Massa
Felipe Massa es uno de los pocos pilotos que ha podido visitar Schumacher en los últimos seis años, pero los pocos amigos y familiares que van a ver al alemán tampoco revelan información sobre el estado de salud.
«Prefieren dejarlo todo entre ellos», dijo Massa durante una entrevista con el programa Well, Friends de SporTV. «Sé cómo está, tengo la información, pero es la familia la que tiene que pasarla, es la familia la que tiene que decir cómo está. Siempre estoy apoyándole, para su recuperación», dijo su ex compañero en Ferrari.
Vía – motorsport.com