- Luces, cámaras… y Barcelona. La capital mediterránea, creativa, vanguardista, cosmopolita y acogedora ha servido y sirve de fuente de inspiración a los artistas de todas las disciplinas audiovisuales.
- Son muchos los spots de automóviles presentados en Automobile Barcelona que se han rodado en la ciudad.
- El Salón celebra su Centenario este año del 11 al 19 de mayo.
Fotógrafos, pintores, publicistas, productores y directores de cine… todos tienen algo en común: catalogar Barcelona como uno de los mejores emplazamientos para desarrollar sus diferentes creaciones. Hablamos de uno de los grandes centros urbanos, económicos y de negocio de la Europa Mediterránea, de una ciudad creativa, moderna, cosmopolita y acogedora con una dilatada tradición comercial.
Barcelona ha sido la capital del motor nacional desde antes de que arrancase en 1919 su primer Salón Internacional del Automóvil, ahora Automobile Barcelona, y los cien años de historia del evento automovilístico –que se celebraran del 11 al 19 de mayo- avalan el buen hacer de una ciudad que es centro de miradas a nivel mundial gracias a la televisión y el celuloide.
Y es que Barcelona siempre ha sabido estar a la altura y a la última. Su dinamismo económico, social, turístico y cultural es innegable. Se lo ha ganado a pulso. Se adapta a los nuevos tiempos con una facilidad asombrosa. De ahí parte de su éxito. Los creativos y artistas así lo han visto: barrios coloridos, playas, parques icónicos, monumentos emblemáticos, buen clima, carácter abierto, mezcla de culturas. Todo ello forma un cóctel explosivo que consigue que pocos o nadie renuncien a Barcelona, lo que la convierte en una de las ciudades más deseadas para inspirarse y rodar.
En 2013 se registraron 2.494 anuncios en Barcelona
Muchos son los spots publicitarios que se ruedan en la ciudad de Barcelona Una buena parte de estos anuncios son de automóviles. Aprovechan la pasión por el motor que siempre han tenido sus ciudadanos y que han facilitado que Automobile Barcelona sea unos de los salones más visitados y que este año del 11 al 19 de mayo celebre su Centenario en el Recinto de Montjuïc. El escenario elegido suele ser el distrito de Poblenou, zona que resucitó con la concesión de las Olimpiadas de 1992 con avenidas modernas, salpicadas de edificios modernos, innovadores y espectaculares.
Y todo ello con el plus de un mar Mediterráneo que siempre suma un color diferente a cada spot publicitario. Los edificios de la zona del Forum también suelen ser protagonistas. Las creaciones arquitectónicas de Jacques Herzog-Pierre de Meuron, Tusquets y Alonso-Balaguer o la torre Telefónica de Enric Massip-Bosch suelen aparecer en varios anuncios. En 2013 se registraron 2.494 anuncios en Barcelona.
Tampoco son raras las tomas desde la montaña del Tibidabo para que el coche anunciado destaque con Barcelona a sus pies y el mar de fondo, algo que también se aprovecha desde la montaña de Montjuïc –en su recinto se celebra Automobile Barcelona- por sus vistas de la ciudad o de la zona portuaria. La capital catalana se convierte así en un inmenso plató al que recurren las agencias de publicidad para rodar sus spots. Las principales marcas de coches se han convertido en clientes habituales, sobre todo cuando quieren destacar el carácter urbano pero a la vez moderno de sus modelos. No en vano las primeras fábricas de automóviles se instalaron en la ciudad condal y en el 1919 ya tuvo lugar el primer Salón del Automóvil de Barcelona.
Seat, por ejemplo, es adicta ya a los paisajes urbanos de Barcelona. Modelos como Ibiza, León o Ateca se han grabado allí. También han pasado por Barcelona otras marcas del Grupo VW. Precisamente Volkswagen rodó el pasado octubre un anuncio con su prototipo Vizzion, el primer eléctrico, aunque también han pisado las calles de Barcelona algún Audi A3 de generación actual que rodó en la zona cercana al Forum, o el A1 anterior. El Mercedes Clase B, Honda con el CRZ, Lexus, el Ford B-Max (con ese saltador de trampolín cruzando el coche camino de la piscina Picornell), modelos de Peugeot, BMW a través de su campaña “cuando conduzcas, conduce”, Smart, Opel, incluso Suzuki también rodó en BCN.
También Ferrari ha protagonizado alguna escena en Barcelona, esta vez en 2014 de la mano de la firma de aceites Pennzoil, que ‘soltó’ un Ferrari 488 GTB de color amarillo por las rondas de la ciudad.El último anuncio en el que aparece la ciudad es el del centenario de Citroën, con imágenes rodadas en el anillo olímpico de Montjuïc y en Montserrat. Las fotografías de catálogos también tienen a la ciudad como protagonista y Rinspeed, por ejemplo, ubicó su última creación (el MircoSNAP) también en Montjuïc, el barrio de l’Eixample, el Forum y el mercado de la Boquería.
Cuna del séptimo arte
Si hablamos de cine, la presencia de rodajes internacionales en Barcelona es casi paralela al nacimiento del cine. Arranca a finales del siglo XIX, cuando los hermanos Lumière envían a un joven colaborador y operador, Alexandre Promio, a cruzar los Pirineos para rodar en España ciertos documentales, “Vistas Españolas”. El primero de ellos lo realiza los primeros días de junio de 1896, en Barcelona, filmando diferentes vistas panorámicas del puerto. Podemos considerarlo como la primera cinta realizada en nuestro que nace bajo el título “Place du port à Barcelone”, estrenándose en la ciudad francesa de Lyon ese mismo año.
A partir de entonces la actividad no ha cesado. La proyección internacional que proporcionaron los Juegos Olímpicos de 1992 a la capital de Catalunya aún atrajo más a las grandes producciones de cine, y el número de rodajes se duplica cada año. La ciudad se consagró en el mapa internacional con el rodaje en 1999 de “Todo sobre mi madre”, de Pedro Almodóvar (la primera vez que el director abandonaba Madrid para rodar en Barcelona), que almacenó una cincuentena de premios, incluido el Óscar a Mejor Película de habla no inglesa.
También ha servido de inspiración para películas de terror, como “REC”, dirigida por Jaume Balagueró y Paco Plaza, que se filmó en Barcelona en 2007 (su grabación se ubicó en el número 34 de la Rambla de Cataluña), o en centro de alabanzas, ese mismo año, con el particular homenaje que hizo el famoso director Woody Allen a la ciudad, todo un ejemplo de cómo una metrópoli puede llegar a convertirse en un personaje más de una película. En “Vicky Cristina Barcelona”, la Sagrada Familia, el Parc Güell, el Tibidabo o La Rambla fueron los escenarios clave en este exitoso film rodado en 2007. Un año antes ya pudimos ver en la gran pantalla la película “El perfume” de Tom Wywker, basada en la célebre novela escrita por Patrick Süskind, donde pudimos deleitarnos con la Barcelona más medieval.
Son varios los escenarios que se construyeron en la ciudad condal, pero según afirmó el director, pocos los efectos de iluminación que fueron necesarios, ya que el estado de las calles ya proporcionaba el efecto deseado. En la plaza de la Mercè y en la Plaza Reial se rodaron importantes escenas.
En 2010 salió a la palestra otra exitosa producción: “3 metros sobre el cielo”, un drama romántico basado en una novela homónima del italiano Federico Moccia cuya historia transcurre en Roma, pero donde Barcelona adquirió todo el protagonismo al adaptar la obra al cine. Y no olvidamos una de las más recientes de producciones para televisión: la serie “La Catedral del Mar” a partir del libro escrito por Ildefonso Falcones, ha tenido como protagonista a la capital catalana durante la construcción de la basílica de Santa María del Mar. Si miramos hacia el futuro, nos detendremos en un estreno de 2019: la serie “Hache”, una historia basada en hechos reales que seguirá los pasos de una mujer que vive en el epicentro del tráfico de heroína en la Barcelona de los años ´60.
Sea como fuere, las infinitas escenas de rodaje que se han dado cita en la ciudad de Barcelona y las que están por llegar ponen de manifiesto que estamos, sin lugar a dudas, ante una de las más importantes capitales del séptimo arte a nivel internacional.