El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha confirmado los planes del ejecutivo de imponer un impuesto al gasóleo para responder a su compromiso en la lucha contra el cambio climático.

Era un secreto a voces adelantado por el nuevo Ministerio de Transición Ecológica que aseguró en palabras de su principal responsable, Teresa Ribera, que “el diésel tenía los días contados”. Ahora ha sido el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el que ha confirmado que el ejecutivo tiene entre sus planes gravar el diésel.

Tal y como recoge Europa Press, el objetivo del nuevo Gobierno es hacer que este combustible pese cada vez menos en la movilidad urbana y responde a las medidas que se están aplicando en otros países y ciudades europeas para cercar al diésel.

«España es un país que está a la cola en la tributación ecológica. Y este Gobierno, que está comprometido con la lucha y la adaptación al cambio climático, con la necesidad de impulsar las energías renovables y de respetar nuestro medio ambiente, pues lógicamente vamos a hacer lo que están haciendo otros países europeos, que es precisamente la imposición al diésel», ha dicho Sánchez en una entrevista con ‘El diario.es recogida por la agencia de noticias.

El presidente del Gobierno ha insistido en que «El diésel tiene que ser un combustible que cada vez pese menos» y cree que es necesario hacer una transición energética y ecológica en España para que el este tipo de combustible deje de ser un carburante a utilizar por los vehículos en la movilidad urbana. Por ello apuesta por abrir un debate sobre la necesidad de articular una tributación que cambie los hábitos y los usos de los ciudadanos.

Eso sí, Sánchez ha asegurado que este tipo de impuesto al diésel no afectará a todos aquellos trabajadores y sectores que por motivos laborales utilizan este tipo de combustible.

[Fuente: caranddriver.es]